Control total sobre los datos:
La empresa tiene la propiedad y el control completo sobre sus datos confidenciales, almacenados en su propio servidor. Esto reduce el riesgo de filtraciones o accesos no autorizados.

Personalización de la seguridad:
Implementación de las medidas de seguridad personalizadas que mejor se adapten a sus necesidades, en lugar de depender de las configuraciones estándar de un proveedor externo.

Escalabilidad a medida:
Es posible ampliar la capacidad del servidor agregando más hardware o software según las necesidades de la empresa, sin depender de las limitaciones de un proveedor externo.

Aplicaciones personalizadas:
Instalación y ejecución cualquier aplicación que la empresa necesite, sin restricciones impuestas por proveedores externos.

Datos seguros:
Los datos confidenciales de la empresa se almacenan dentro de las instalaciones de la empresa, lo que reduce el riesgo de robo o acceso no autorizado.

Evitar la recopilación de datos por parte de terceros:
La empresa evita la recopilación y el uso de sus datos por parte de terceros, a diferencia de lo que sucede con algunos proveedores de servicios en la nube.